El laboratorio cuenta con un total de 50 tanques de incubación que producirán al menos 500 bandejas diarias de nauplios de artemia, especie de crustáceo utilizada como alimento de las larvas de camarón, en su proceso de producción.
Escrito por: redacción / El Universo.com
Este avance en el sector camaronero se realizó con la tecnología de la marca I&V BIO y la empresa Codemet. La inauguración del laboratorio se recientemente en el Centro de Desarrollo y Producción de Artemia, en San Pablo, Santa Elena.
José Carlos Peré, representante de Codemet, explicó que los quistes de artemia antes de ser importados al Ecuador son procesados en el centro de tecnología de I&V BIO, en Bélgica y se exportan al país.
Esto, debido a que la regulación requiere que previamente se envíe a un laboratorio aprobado por la Organización Mundial de Sanidad Animal para analizar que estén libres de las enfermedades, detalló.
Explicó que en procesos anteriores había riesgo de que las bacterias florecen rápidamente durante la eclosión y son difíciles de controlar, entre otros.
Iván Ontaneda, ministro de Comercio Exterior, que llegó a la inauguración, dijo que este modelo de producción de artemia es una innovación para el sector del camarón, mercado que mueve al menos 3500 millones de dólares en exportación y tiene al menos 260 000 plazas de empleo.
“Hemos duplicado la producción de camarón en los últimos cinco años. Y queremos que aumente con la inversión privada, con la calidad que ofrece”, explicó el ministro.
A su vez, el vicepresidente Otto Sonnenholzner indicó que este es un cambio importante, ya que el proceso de producción del camarón es complejo en el tema climático, en costos, entre otros factores.
“Ahora el camarón produce cinco veces más, ha habido crisis, pero ahora hay mucha oportunidad en este sector”, explicó Sonnenholzner y felicitó a cada uno de los integrantes del proceso de producción.
Al sitio llegaron empresarios y colaboradores de las áreas, desde la adecuación de criaderos, biólogos, entre otros especialistas en este mercado.
“Este tipo de producto les permitirá a los laboratorios seguir estrictos protocolos de bioseguridad, liberándolos de la carga de eclosionar quistes de Artemia en condiciones que a menudo no son las óptimas”, detalló el empresario.
José Carlos Peré Idrovo, quien maneja el laboratorio, dijo que el producto es procesado con un estricto protocolo de seguridad que conlleva poder entregar a los clientes un producto final libre de vibrios y bacterias con nauplios vivos en animación suspendida.
Agregó que esta tecnología también se usa en países como Tailandia, Vietnam e India.
Para los próximos meses se prevé aumentar a 50 tanques adicionales en ese laboratorio para abastecer a más centros de cultivo de larva de camarón que hay desde la costa de Esmeraldas hasta en Santa Elena.
En estos centros se hace una producción de 5000 millones de larvas por mes, aproximadamente. Y podrían llegar a 7000 millones mensuales de acuerdo con el manejo del centro.
Peré explicó que la presentación a los laboratorios será en unidades de 800 gramos, lo cual es equivalente a una lata de quistes de Artemia.